Síndrome de Burnout (Estrés Laboral)

¿Alguna vez te has encontrado tan hastiado de tu trabajo, que quieres levantarte y dejar todo? O quizá conoces a alguien en tu trabajo que empezó bien, pero ahora no le importa lo que hace, está cometiendo errores o se enferma con frecuencia. Pueden estar experimentando burnout

El conocido Síndrome de “Burnout” o Síndrome del Trabajador Quemado (STQ) es un estado de estrés crónico mal manejado caracterizado por síntomas de agotamiento mental y físico, desconexión del trabajo y sentimientos de incapacidad.

Recientemente este fenómeno ha sido añadido por la OMS al ICD-11 (clasificación internacional de enfermedades), con la aclaración de que no se trata de una enfermedad, sino un fenómeno ocupacional.

Se asocia tradicionalmente a personal de salud y cuidadores en general, sin embargo cualquier profesional con alto estrés y un trabajo de alta demanda puede experimentarlo; sobretodo quienes ofrecen atención al público.

Algunas situaciones que pueden llevar a burnout: (1)

  1. Sobrecarga laboral.
  2. Poca estimulación y reto.
  3. Monotonía y falta de control.
  4. Malas relaciones en el ambiente laboral.
  5. Falta de compromiso con el trabajo que se hace.

Las 3 características principales del STQ son: (2)

  1. Agotamiento emocional y físico: la persona se siente falta de energía y con demasiada carga. Pueden haber problemas digestivos, insomnio, pérdida del apetito, dificultad para concentrarse, depresión, ansiedad, etc.
  2. Desconexión del trabajo y cinismo: su trabajo le frustra, hay despersonalización, pesimismo, falta de empatía y de disfrute.
  3. Bajo rendimiento: se afectan las tareas en el trabajo y la casa. Les cuesta concentrarse, les falta creatividad, hay apatía, irritabilidad, etc.

La forma ideal de abordarlo es enfocándonos en mejorar el ambiente laboral, más que cambiar al trabajador.

Las intervenciones más poderosas, para reducir el burnout en la fuerza laboral son: (7)

  • Mejorar el flujo de trabajo.
  • Promover el trabajo en equipo.
  • Potenciar el liderazgo en la organización.

¿Qué hacer personalmente cuando se experimenta burnout? (3, 4)

  • Hacer inventario de lo que te causa frustración, para atenderlo.
  • Tomar pausas entre proyectos grandes.
  • Establecer prioridades y delegar oportunamente.
  • No llevarse el trabajo a la casa.
  • Cultivar una vida social fuera del trabajo.
  • Hacer énfasis en las cosas positivas.
  • Aplicar técnicas de manejo del estrés.
  • Buscar ayuda de un terapeuta y/o grupos de apoyo.

A pesar de que el STQ y la depresión tienen síntomas en común, son dos fenómenos diferentes, particularmente porque el primero aparece en relación al trabajo específicamente y la depresión se expresa en múltiples áreas de la vida; sin embargo el ‘burnout’ puede llevar a depresión. (5)

Un estilo de vida saludable ayuda a prevenir el burnout y el mantenimiento básico consiste en: (para sorpresa de nadie)

  1. Dormir suficiente. (6)
  2. Comer e hidratarse bien.
  3. Hacer ejercicio físico.

Una de las cosas que tienen en común muchas personas con burnout es que han perdido la pasión por lo que hacen. Redescubrir esa pasión puede ser la clave para impulsar cambios positivos, que les permitan cuidar de su salud y desempeñarse mejor.

Las organizaciones deben contribuir al bienestar de sus colaboradores (su mejor activo), pero el principal responsable de nuestra salud es uno mismo. Recuerda siempre que el trabajo nunca se detiene, pero la salud se puede perder, así que ámate y cuídate.

Más sobre el estrés: «Manejo del Estrés: Lo que Necesitas Saber».

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